Lenny es un gatito de siete años al que le gusta merodear por la estación de tren de High Peak, en Derbyshire (Reino Unido), cerca de su casa, y le gusta que lo acaricien los viajeros que esperan por la mañana, pero el 10 de noviembre hizo algo que no había hecho nunca: se subió a un tren.

Tal y como recoge el Mirror, sus dueños, James y Laura Stockton, revelaron que siempre temieron que su extrovertida mascota algún día se subiera a un tren y, para sorpresa de los viajeros, eso fue lo que sucedió.

Lenny salió de casa, caminó hasta la estación y se subió a un tren que se dirigía a Piccadilly. Lo más curioso es que la pareja descubrió la escapada de Lenny cuando Laura vio una publicación en un grupo local de Facebook.

La publicación mostraba una foto de Lenny de pie en uno de los asientos de la mesa del tren, con la leyenda: "Este gato viaja en el tren entre Buxton y Whaley Bridge". Laura llamó rápidamente a su marido James y comenzaron a planificar cómo recuperarlo.

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"La publicación en Facebook se compartió mucho, por lo que nos contactaron muchas personas que lo reconocieron y sabían que nos pertenecía", dijo James Stockton.

"Revisé su rastreador AirTag y pude ver que estaba a unas cinco millas de distancia. Estaba trabajando desde casa y no tenía coche, así que le pedí a mi vecino que me llevara hasta Whaley Bridge armado con una caja de golosinas para gatos Dreamies y un transportín", prosiguió.

Afortunadamente, James conocía a personas que vivían cerca de la estación y que vieron a Lenny en el andén. Se las arreglaron para llamarlo, recogerlo y llevarlo a un lugar seguro. "Cuando llegué, ya lo habían atrapado", dijo James. "Lo llevé a casa y le hablé severamente", bromeó.

"Lenny es muy conocido por todos los viajeros y regularmente pasa tiempo molestándolos a todos mientras suben y bajan del tren. Le gusta deambular un poco y ya lo han visto antes a más de una milla de su casa. Es súper amigable y se acerca bastante. Casi nadie se preocupa, excepto cualquiera que tenga un perro. Desde la publicación en Facebook hasta llevarlo de regreso a casa fueron solo unos 50 minutos. Tuvimos mucha suerte. Fácilmente podría haber terminado en Piccadilly", concluyó.